MONZA innova en una pieza de tradición clásica, el chaleco de camarero. Se actualiza esta prenda gracias al tejido punto denim y detalles como el cierre con cremallera, el bolsillo multifunción y el lavado a la piedra.
La marca difumina las líneas entre la moda y el workwear en la colección de sala MONZA Ready to Serve, dotando de mayor protagonismo al tejido denim, un tejido de culto en el streetstyle.